Sin embargo, los cambios en el estilo de vida, el estrés y los desequilibrios en la ingesta nutricional pueden alterar este estado ideal, dando lugar a la aparición de diversos síntomas negativos, que pueden manifestarse como dolores menstruales, irregularidades menstruales, trastornos de la menopausia, trastornos del sueño, problemas de la piel, etc.

Durante nuestra estancia en Japón, colaboramos con ginecólogos y adquirimos una amplia experiencia en tratamientos. Como miembros de la Sociedad Japonesa de Acupuntura y Moxibustión, también tuvimos acceso a numerosos documentos especializados que no suelen estar disponibles para el público en general.

Diagnosticamos la relación entre los equilibrios hormonales únicos y los estados mentales de las mujeres desde una perspectiva de medicina oriental, y pudimos abordar de manera efectiva casos que no podrían entenderse completamente mediante la medicina occidental por sí sola. Todo esto se llevó a cabo mediante varios métodos de tratamiento basados en la medicina tradicional japonesa de acupuntura y moxibustión.